En Qué consiste
el método de lecto-escritura
María Victoria
Troncoso?
Introducción.........................................................................................
El
proceso educativo de las capacidades.............................................
Perceptivas
y discriminativas...............................................................
Desarrollo
de Capacidades......................................................
Planteamiento
general..................................................
“La Atención ”.........................................................................
Educación
de la atención.............................................
Instrumentos
para el desarrollo de la atención.............
“Percepción
y Estimulación”..................................................
Intervención
Educativa................................................
“La Habilidad Manual ”
Direccionalidad
y coordinación visomanual................
Material
y actividades..................................................
Método
de aprendizaje perceptivo-discriminativo
Introducción
y objetivos..............................................
Método de
Lectura y Escritura
Etapas
del método................................................................................
LECTURA:
“Lectura:
Primera etapa”
(Percepción Global y Reconocimiento de
Palabras)...............
Criterios
para la Selección
de Palabras........................
Preparación
del material...............................................
Lectura
atenta e inteligente de palabras.......................
“Lectura:
Segunda etapa”
(Problemática de las Sílabas)...................................................
Aprendizaje
de Sílabas................................................
Objetivos.........................................................
Material
y modo de usarlo...............................
Lectura
atenta e inteligente..........................................
“Lectura:
Tercera etapa”........................................................
ESCRITURA:
Concepto
y planteamientos fundamentales..........................................
Requisitos
Iniciales..................................................................
Otras
condiciones importantes para tener en cuenta................
Ayudas.....................................................................................
“Escritura:
Primera etapa”
(Etapa de atención temprana)..................................................
Trazos
verticales...........................................................
Trazos
horizontales......................................................
Trazado
de la cruz........................................................
Trazado
de diagonales.................................................
Trazado
del círculo y de las líneas curvas...................
Trazado
de números.....................................................
“Escritura:
Segunda etapa”....................................................
Modo
de trabajar.........................................................
Enlace
de las letras: las sílabas....................................
Primeras
palabras.........................................................
Caligrafía.....................................................................
Dictado:
la escritura atenta e inteligente
de
palabras...................................................................
Escritura
de frases........................................................
Copias..........................................................................
Uso
funcional de la escritura.......................................
“Escritura:
Tercera etapa”.....................................................
María Victoria Troncoso es, desde hace muchos años, Presidenta
de la Fundación
Síndrome de Down de Cantabria. Su vida profesional comenzó
por caminos muy diferentes a los del mundo de la discapacidad, pues se licenció
en Derecho por la
Universidad de Navarra. Un buen día se aplicó en ella el
arraigado refrán popular que dice: “El hombre propone y Dios dispone”. María
Victoria es madre de cuatro hijos; las dos chicas tienen discapacidad
intelectual y fue hace 37 años cuando tuvo que aplicar todo lo que sabía de
“derechos” para volcarlos sobre las personas más desprotegidas e inculcarles no
sólo lo que merecían tener sino los deberes que tenían por cumplir a lo largo
de sus vidas. Pocos años después se diplomó en Pedagogía .
Estas
circunstancias fueron vitales y determinantes para que María Victoria dedicase
toda una vida a luchar por los derechos de este colectivo y para la creación de
este gran método de lecto-escritura del que vamos a tratar.
El método, nace como fruto de una experiencia educativa que,
iniciada desde la década de los setenta de manera balbuciente y desarrollada en
la de los ochenta, ha visto confirmado su valor, de modo generalizado, en la
actual. Podemos afirmar con plena convicción que en principio, todas las
personas con síndrome de Down tienen capacidad para leer y escribir de forma
comprensiva y, sobre todo, son capaces de disfrutar con estos logros.
Del mimo modo encuentro intolerable,
la actitud de la tutora de Laura, que en su caso concreto dijo, y cito
textualmente “Si esta niña, que
recordemos no tiene ningún tipo de dificultad cognitiva demostrada, realiza algún avance en la lectura o en la
escritura, sería considerado como un milagro”
María
Victoria y su colaboradora, María Mercedes del Cerro, nos ofrecen un método
nuevo de lectura y escritura para alumnos con Síndrome de Down. Es nuevo porque
empiezan a leer niños que aun no saben hablar. Es nuevo porque lectura y
escritura se enseñan por separado. Los niños en primer lugar leen y después
escriben. Es nuevo, porque la comprensión de lo leído esta presente desde el
inicio de la enseñanza hasta el progreso lector. Es nuevo porque se ha
elaborado teniendo en cuenta las características de la lengua española para que
el alumno progrese eficazmente y con rapidez.
Este método, viene recogido en un
libro donde se agrupa toda la experiencia educativa para presentar el método de
manera gradual, paulatina y práctica. Pero encima de todo, se expone de forma sencilla y secuencial los
innumerables y cortos pasos que hay que dar para conseguir la habilidad en la
lectura y en la escritura.
Lectura y escritura, ambas, son
lenguaje escrito. Pero es evidente que
se desarrollan de modo muy distinto, tanto en su programación cerebral como en
su ejecución. Por eso hemos separado claramente la metodología a seguir en el
aprendizaje de ambas habilidades; y dadas las dificultades expresas en el área
de la escritura y la larga duración de su adquisición, se elaboran y detallan
abundantes ejercicios que nos sirven de rica fuente práctica para la actividad
profesional.
Es evidente, que el método, aunque
ha sido diseñado específicamente para los niños con síndrome Down, es
igualmente útil, para enseñar a leer y escribir a niños con o sin discapacidad
mental. De ahí nuestra aplicación, al
caso real de Laura.
La educación; es un proceso que
comienza en la cuna y continúa de manera ininterrumpida durante toda la vida,
tanto más cuanto más problemas existan. El aprendizaje de la lectura y la
escritura queda íntimamente incorporado
a este proceso. Por este motivo,
la exposición del método se inicia con la descripción e las características
mentales y cognitivas de los niños con Síndrome de Down. No obstante, no recogeremos en este proyecto tales características pues
la intención con la que se ha elaborado este trabajo es la del estudio de caso
de “Laura”.
Este
método hace especial incapié en la atención, la percepción, la discriminación y
la destreza manual, para introducir al niño en el proceso lector. Por eso
enfatizan más en la descripción del aprendizaje perceptivo-discriminativo.
Posteriormente expondremos con detalle el descubrir de las diversas etapas:
primero de la lectura, a través de la percepción global y reconocimiento de
palabras escritas, reconocimiento y aprendizaje de sílabas, y el progreso en la
lectura, y, posteriormente, de la escritura, explicando con detalle la fase
previa de maduración y las diversas etapas del desarrollo.
La enseñanza de la lectura y de la
escritura a cualquier niño; ya tenga algún tipo de deficiencia o no; es una
parte esencial de la tarea educativa. Y es que no debemos olvidar que la
lectura y la escritura contribuyen de manera decisiva a la incorporación de
cualquier persona al mundo que nos rodea.
EL PROCESO EDUCATIVO DE LAS CAPACIDADES
PERCEPTIVAS Y DISCRIMINATIVAS.
Debemos tener en
cuenta, siempre, que las grandes diferencias interindividuales de los niños,
así como los distintos modelos educativos y ambientales, producen resultados
diferentes. Más aún, en la actualidad y como consecuencia de los diferentes
modelos educativos y ambientes, todavía es frecuente encontrar adolescentes,
jóvenes y adultos con dificultades que no han aprendido a leer y a escribir,
aunque lo hayan deseado y tengan capacidad para ello. El programa deberá
adaptarse a sus intereses y necesidades respetando la edad que tengan, su
motivación y su madurez.
“Creemos que un programa bien adaptado a sus
necesidades e intereses hará milagros” (MºVitoria Troncoso,…..)
DESARROLLO DE CAPACIDADES
Planteamiento
general
La educación de todos los niños debe ir enfocada a la adquisición y el
desarrollo de sus capacidades, de modo que puedan actuar con madurez y
responsabilidad, lograr su autonomía personal y adquirir conocimientos y
destrezas que les permitan integrarse al máximo en el grupo social y cultural
al que pertenecen.
Una capacidad bien desarrollada será
la llave que abra la puerta a un amplio abanico de destrezas y habilidades. La
atención, la discriminación y la percepción, así como la destreza manual, no
sólo son imprescindibles para aprender a leer y a escribir con soltura, sino
para otros muchos aprendizajes.
El educador debe tener siempre presente
el objetivo educativo fundamental preparando muchos y variados recursos para conseguirlo. Durante
la ejecución del programa deberá tener suficiente creatividad y flexibilidad
para variar las actividades y ejercicios, eligiendo aquellos que mejor ayuden
al niño en un momento concreto. Con frecuencia deberá posponer “la perfección”,
en beneficio de mantener alta la autoestima del niño, su motivación y su
alegría por el esfuerzo realizado, aunque el resultado no sea el “ideal”. La
realidad de un niño concreto y todas sus características personales merecen
toda nuestra aceptación y respeto. Como consecuencia de nuestro deber como
educadores y nuestro afecto por el alumno, le ayudaremos a mejorar, pero no le
exigiremos más de lo que puede, ni nos frustraremos porque no alcance “nuestro”
ideal. Lo importante es que el alumno siga progresando, a su propio
ritmo (nunca por debajo de sus posibilidades), pero sin la pretensión de
alcanzar el mismo nivel de otro alumno que va “muy bien”.
Los
primeros programas de estimulación precoz dedican un gran esfuerzo al
desarrollo de la motricidad, lo cual es importante y necesario, aunque no
suficiente. Desde hace unos años van incorporándose las llamadas actividades
preacadémicas en los programas de atención temprana para niños menores de 4
años. La aplicación de las teorías de
Piaget ha servido para desarrollar programas de carácter cognitivo que incluyen
objetivos relacionados con la capacidad de imitación, resolución de problemas,
adquisición del concepto de permanencia del objeto, interacción personal, de
actuación sobre las cosas, de conocimiento de las propiedades de los objetos y
de desarrollo de las capacidades perceptivas, cognitivas y lingüísticas. Todo
cuanto el bebé hace o deja de hacer durante su primer año de vida influye en su
futuro desarrollo intelectual. Conforme el niño madura es preciso que participe
activamente en nuevas experiencias que le ayuden a establecer las bases
fundamentales de los aprendizajes básicos. Por ello debemos tener en cuenta que
todo cuanto se haga por ayudarle a
mejorar su capacidad de atención, observación y percepción debe ocupar un lugar
privilegiado.
ATENCIÓN:
La
atención es un proceso complejo que
exige la participación coordinada de extensos núcleos y circuitos cerebrares,
capaces de recibir la información que llega a través de los órganos de los
sentido y de hacerla relevante para el individuo. Estos sistemas cerebrales,
además, varían en su funcionamiento y en su contribución al desarrollo de la
atención según el tipo de información sensorial que se reciba, sea visual, auditiva,
táctil, etc. La atención es la capacidad
de dirigir la corriente de nuestra conciencia hacia un objeto o suceso. En
la atención hay un doble juego: primero, es atraída, llamada, evocada por un
acontecimiento, objeto o suceso; pero después la atención tiene que ser
aplicada, mantenida.
Para que se pueda desarrollar y
mantener esa atención selectiva, se necesita que operen primero los circuitos
cerebrales aplicados en la orientación,
después, los implicados en la llamada de atención
ejecutora, y por último, los circuitos del estado vigilante, gracias
al cual la atención se mantiene.
En los niños con dificultades existe
una limitación en la transmisión y comunicación de muchos de estos sistemas
neuronales.
Los especialistas en educación
debemos dedicar un esfuerzo especial al desarrollo de la capacidad de atención,
pues es el fundamento de otras muchas adquisiciones.
Desde que nace, el niño se orienta,
y esto explica a los padres y a la familia la importancia que tiene el
desarrollo de esta capacidad. El niño con dificultades en esta área puede tener
dificultades para fijar la mirada. Las dificultades de percepción y
discriminación auditivas pueden llevar al niño a no escuchar, a no atender
auditivamente y a preferir una acción manipulativa llevada a cabo según sus
intereses. (Recordemos que Laura tuvo
grandes carencias auditivas hasta los tres años de edad.) Posteriormente,
los problemas de memoria auditiva secuencial (Pueschel, 1988) de algún modo le
bloquean o dificultan el mantenimiento de la atención durante el tiempo
preciso, ya que adquiere la experiencia de su incapacidad para retener mucha
información secuencial.
Conociendo las posibles causas de
estas dificultades, y ante la imposibilidad de actuar directamente sobre ellas,
nos queda el recurso educativo de un entrenamiento o estimulación tempranos
adecuados y mantenidos, realizados con actividades bien programadas y llevadas
a cabo con perseverancia.
De este modo vemos cómo los niños
establecen y mantienen la atención, lo cual les permite estar preparados para
situaciones muy variadas de aprendizaje, conducta y relación.
Educación de la atención:
En el desarrollo durante los
primeros meses de vida extrauterina se trabaja la atención visual y simultáneamente la atención auditiva.
El estimulo más recomendado, por su
interés y eficacia, es el rostro y la voz humanos, preferentemente los de la
madre.
Muy pronto se planteará el objetivo
de que el niño reaccione y atienda adecuadamente cuando se le llama por su
nombre. Esta atención `podrá mostrarla interrumpiendo su actividad, volviendo
la cabeza al origen de la llamada, mirando ala persona que le llama, teniendo
una actitud de alerta y espera. En este momento, con el niño mirando,
atendiendo y esperando, es cuando puede dársele la instrucción o información
que precisa o mostrarle y entregarle un objeto concreto.
Instrumentos para el desarrollo de la
atención:
Los
niños con dificultades en ocasiones comienzan a actuar, a dar respuestas
motoras, antes de procesar bien la información recibida y elaborar la respuesta
correcta. Conviene, por tanto, darles tiempo y enseñarles a inhibirse para
darse a sí mismos unos segundos de reflexión. Esto no se debe a la falta de
comprensión ni de conocimientos, sino a sus diferentes “tiempos”. Si el niño está
trabajando con material manipulativo (tarjetas,
maderitas…), los errores pueden corregirse fácilmente. Si se trabaja con
papel y lápiz, el error puede quedar plasmado. En cualquier caso, conviene
evitarlo habitualmente, no sólo para que el alumno no viva la sensación de
fracaso, sino también para que lo percibido visualmente sea lo correcto. Una
estrategia sencilla consiste en que el educador sujete suavemente las manos del
alumno al tiempo que le da la orden y el niño la recibe, la procesa, elabora la
respuesta y muestra con su actitud o con su mirada que va a ejecutar la acción
correcta. Si, a pesar de esos segundos de tiempo, el niño se dirige al objetivo
o estímulo que no corresponde, el adulto puede tapar con la mano dicho objeto;
así el niño tiene la posibilidad de volver a pensar y responder con acierto. Si
la actividad se realiza en papel, antes de darle el lápiz, se pedirá al niño
que señale con el dedo dónde esta el objeto que debe tachar o subrayar, o que
siga con su dedo la trayectoria que debe realizar. Cuando lo haga bien, se el
entregará el instrumento para escribir.
Es imprescindible elegir bien el mobiliario que se va a
utilizar y su colocación. El niño debe tener las piernas juntas, con los pies
apoyados en el suelo o en una plataforma y con las rodillas flexionadas en el
borde del asiento, formando un ángulo recto. La altura de la mesa será la adecuada para el tamaño del niño de
modo que, sentado como acabamos de explicar sus brazos puedan quedar apoyados
sobre la mesa sin tener que levantarlos y si que el niño se eche hacia delante
en la silla.
Cada vez que el niño se canse y
relaje su postura, habrá que recordarle que debe estar bien colocado,
utilizando frases del tipo: ¿Dónde esta
la otra mano? ¿Estás bien sentado?
Con el niño bien sentado, tranquilo,
mirando al adulto y en espera de la tarea, es cuando puede empezarse el
trabajo.
Después de que el niño ya esta bien
atento, dispuesto y se empieza el trabajo, conviene simultanear el estimulo
visual con el auditivo (debe cuidarse la comunicación verbal para mantener la
atención y para que aprenda más y mejor sobre lo que ve y sobre lo que hace.)
Siempre que sea posible, y lo es en
muchas ocasiones, se dará a elegir al niño que prefiere hacer. Esto nos
facilitará que el niño mantenga su atención con mayor facilidad, además de
hacerle más consecuente y responsable de sus decisiones... “me lo has pedido tú” “tú lo has elegido, por tanto, vamos a terminarlo
antes de…”
PERCEPCIÓN
Y ESTIMULACIÓN
La percepción requiere inicialmente
un mínimo desarrollo de la atención, pero implica el funcionamiento preciso de
grandes áreas corticales de asociación, en el cerebro. Normalmente estas áreas
se desarrollan con más lentitud que las sensoriales primarias, las cuales
reciben los estímulos con toda la riqueza de matices, hasta darles plena forma.
La capacidad de discriminar y distinguir unos estímulos de otros o, por el
contrario, de asociarlos, exige la presencia de redes nerviosas cada vez más
intrincadas y más relacionadas unas con otras.
Entendemos por discriminación la
habilidad para percibir semejanzas y diferencias, respondiendo de un modo
diverso ante lo percibido. El uso de la habilidad discriminativo forma parte
imprescindible de la vida diaria para funcionar de un modo eficaz. De hecho,
todos usamos habitualmente nuestras habilidades discriminativas en múltiples
circunstancias ordinarias. Desde el momento en que suena el despertador y
reconocemos ese sonido, pasando por la elección correcta de la ropa que nos
vamos a poner cada día. Pero, además de todas estas situaciones, el aprendizaje
discriminativo es imprescindible en los programas educativos de la primera
infancia para preparar a los niños para los aprendizajes académicos. Los
alumnos con necesidades educativas especiales, necesitarán más que el resto de
los alumnos de una enseñanza específica para paliar o prevenir sus dificultades
de aprendizaje.
La educación de estas capacidades
incluye las habilidades para reconocer, identificar, clasificar, agrupar y
nombrar los objetos, imágenes y grafismos. También forma parte del aprendizaje
discriminativo el reconocimiento e identificación de sonidos y palabras.
Un buen aprendizaje discriminativo
facilitará al alumno el pensamiento lógico, el conocimiento de las formas, los
tamaños, las texturas, los colores y otras propiedades de los objetos, los
conceptos numéricos y la lectura.
Intervención educativa.
Los educadores deberán poner un empeño
especial en conseguir que el niño desarrolle sus capacidades de atención,
observación, percepción y discriminación, que le facilitaran una actuación
adecuada en cada momento. Como es natural, los niveles o exigencias serán un
poco más altos cada vez, de modo que el niño progrese en todas sus capacidades.
Las tareas incluirán actividades que faciliten también el desarrollo de la
destreza manual y de las capacidades cognitivas y lingüísticas. También ahora
será preciso seguir un programa sistemático y estructurado para lograr que el
niño esté bien preparado para los aprendizajes escolares.
Los niños que tengan algún tipo de
dificultad general de aprendizaje, necesitan ver y hacer de un modo sistemático
y ordenador, para aprender y comprender.
Esta necesidad implica que el
educador haga un buen programa, aprovechando cada una de las tareas realizadas
por cada alumno. En cada una de las tareas el niño debe recibir una buena
información verbal de lo que realiza. Además, en torno al objetivo fundamental
de esa actividad, se aprovechará esa tarea para repasar o afianzar objetivos de
otras áreas.
En
resumen, el desarrollo de las capacidades perceptiva y discriminativa
implica que el alumno aprenda a observar y capta semejanzas y diferencias, las
relaciona, las asocia y las clasifica según diversas categorías y códigos.
Aprende a comprender los términos y conceptos que implican esas relaciones y a
nombrar las diferentes cualidades o propiedades, siendo capaz de dar pequeñas
explicaciones. Todo esto se consigue, en parte, con la manipulación y
exploración natural que el niño hace con todos los materiales que se le dejan a
su alcance, pero lo adquirirá mejor si, además, recibe una enseñanza
sistematizada y estructurada en al que se seleccionen los materiales
manipulativos y las representaciones gráficas más adecuadas a cada uno de los
objetivos específicos y parciales que quieran alcanzarse.
HABILIDAD MANUAL
Direccionalidad
y coordinación visomanual
Como estamos hablando de la preparación para un futuro programa de
lectura y escritura, no se olvidará que nuestro sistema para leer y escribir
tiene una dirección concreta, que va de izquierda a derecha y , por tanto, se tendrá
mucho cuidado para que el niño trabaje de modo que la mirada y los movimientos
de su mano sigan esa dirección, o sea comenzado a mirar y a colocar la mano o
el dedeo en el lado izquierdo y continuando
el retraso visual y movimiento manual hacia el lado derecho, hasta llegar al
final del estímulo que se le presente, así , sin darse cuenta, adquirirá de
modo automático un movimiento visual y manual simultáneos que facilitarán mucho
el aprendizaje y el progreso en la lectura y en la escritura.
Este trabajo de rastreo visual y
movimiento manual es especialmente importante si nos encontramos con un niño
zurdo.
Material
y actividades:
Actualmente
disponemos de abundante y variado material que se usa habitualmente en las escuelas infantiles y
que debemos tener a mano. Cada material facilita una destreza determinada.
Materiales como por ejemplo la plastilina, la pintura de dedos, las
construcciones tipo lego…favorecen la destreza manual así como la coordinación
visuomanual de forma cada vez más precisa y
eficaz.
El uso del lápiz y el papel ya
requiere de mayor complejidad puesto que es necesario sostener el lápiz y
deslizarlo por el papel con la presión suficiente como para marcar el folio, pero
sin rigidez.
En el apartado de la preescritura
detallaremos algunas actividades concretas y materiales que son útiles en esta
etapa.
METODO
DE APRENDIZAJE PERCEPTIVO-DISCRIMINATIVO.
Introducción y objetivos:
Lo que permite al niño con dificultades progresar en los programas
educativos que la escuela común ofrece, es el desarrollo de sus capacidades
perceptivas y discriminativas. Un buen programa de aprendizajes discriminativo
permite al niño desarrollar su organización y orden mental, el pensamiento lógico,
la observación y la comprensión del ambiente que le rodea. De este modo está
preparado para avanzar en las diferentes áreas de trabajo académico que,
realizando de un modo adecuado, le facilitará una buena preparación para su
vida social y laboral de joven y adulto.
El objetivo inicial de cualquiera de las sesiones educativas de
aprendizaje discriminativo es que el alumno comprenda qué debe hacer, cómo debe
hacerlo y que concepto o conceptos subyacen en al activad que realiza. Pero un
programa de aprendizaje discriminativo sirve también para alcanzar objetivos
diversos, como son el aumento del vocabulario, el conocimiento y la comprensión
de las propiedades y cualidades de los objetos, las nociones básicas de
cálculo, y la preparación para la lectura y la escritura…
En primer lugar el niño aprenderá a asociar objetos iguales, objetos con
fotos…después clasificará objetos que siendo diferentes pertenezcan a una misma
categoría o cumplan una función semejante, animales con animales, prendas de
vestir…Todas estas actividades y su comprensión pueden lograrse en la etapa
preescolar.
En resumen, estaremos llevando a cabo tareas de asociación, selección, clasificación, denominación y generalización.
(Las actividades de nominación
y generalización serán las ultimas en enseñar por su mayor grado de dificultad
debido a la necesidad del domino de la capacidad de abstracción.)
En este apartado no profundizaremos
en el modo de trabajar ya que Laura tiene dominada esta fase.
MÉTODOS DE LECTURA Y
ESCRITURA
ETAPAS
DEL MÉTODO DE LECTURA:
Este método comprende 3 etapas diferenciadas por los objetivos concretos
y por los materiales propios de cada una de ellas. Al mismo tiempo las tres
etapas están interrelacionadas y en ocasiones, deben trabajarse simultáneamente
objetivos de una y otra. La razón fundamental es que deben mantenerse y
consolidarse las condiciones de comprensión, fluidez y motivación en cualquier momento del proceso. No es
preciso completar absolutamente todos los objetivos de una fase para pasar a la
siguiente.
La primera etapa es la de percepción global y reconocimiento de palabras escritas comprendiendo su significado.
Lo importante en esta etapa es que el alumno entienda en qué cosiste leer; es
decir que, a través de de unos símbolos gráficos, reaccede a significados y a
mensajes. Se empieza con palabras aisladas y pronto se le presentan frases.
En la segunda etapa se trabaja
el aprendizaje
de sílabas. El objetivo fundamental es que el alumno comprenda que hay un
código que nos permite acceder a cualquier
palabra escrita no aprendida previamente. Cuando dominamos el código podemos
leer todos los textos escritos en nuestra lengua.
En la tercera etapa, la etapa
del progreso lector; el objetivo
fundamental es lograr que el alumno lea textos, progresivamente más complejos,
que le permitan:
a.
Hacer un uso práctico y funcional de sus habilidades
lectoras
b.
Usar la lectura como una actividad lúdica de
información y entretenimiento en sus ratos de ocio
c.
Aprender, en sentido amplio, a través de la información
escrita.
LECTURA: PRIMERA ETAPA
(PERCEPCIÓN GLOBAL Y RECONOCIMIENTO
DE PALABRAS)
El objetivo general es que el alumno reconozca visualmente, de un modo
global, un gran número de palabras escritas, comprendiendo su significado. Este
reconocimiento deberá producirse tanto si las palabras se le presentan aisladas
de una en una o formando frases. Para conseguir este objetivo general nos
propondremos antes conseguir una seri de objetivos específicos que poco a poco
nos conducirán al dominio de esta etapa. Un ejemplo de objetivo específico para
este período sería el reconocimiento por parte del alumno de su nombre escrito
y el de cuatro o cinco miembros de su familia, o de su ámbito más cercano.
Criterios para la selección de palabras:
Es
muy aconsejable escoger aquellas palabras que más pueden interesar al niño.
Debemos tener en cuenta además una serie de criterios:
ü
Palabras con un significado claro y conocido por
el niño
ü
Palabras que puedan representarse gráficamente.
ü
Preferentemente, aunque no de forma exclusiva se
eligen palabras cortas…etc.
Preparación del material:
El material siempre deberá ajustarse
al niño. Se debe ser flexible y creativo teniendo en cuenta que cada niño
requiere un método de trabajo distinto.
Las palabras deben estar escritas
con letra grande y clara. El color inicial que se recomienda utilizar es el
rojo, ya que ayuda al niño en su
percepción y en su memoria visual. Cada una de las palabras es importante, que
se puedan abarcar con una mera ojeada, sin necesidad de mover los ojos. Otro
rasgo importante a tener en cuenta es que las palabras deben estar escritas con
corrección ortográfica; por ejemplo los nombres propios se escribirán siempre
con mayúscula.
Los sustantivos deberán ir siempre precedidos por el artículo el o la.
Siendo así, el niño aprenderá pronto esas dos sílabas y la concordancia
entre el género y el número.
Las tarjetas-foto: (Anexo.1.)
La tarjeta-foto es el elemento
fundamental al inicio del programa. Para
confeccionarlas es necesario hacernos con las fotos de los padres y hermanos
del alumno. En la parte inferior de la tarjeta y debajo de la foto pondremos el
nombre de la persona retratada.
Conforme el niño progresa y entiende
el por qué de la foto y del nombre escrito, pueden prepararse otras muchas
tarjetas-dibujo.
Las tarjetas-palabra: (Anexo.2.)
Las tarjetas-palabra se preparan con
2 o más tarjetas por cada una de las tarjetas-foto o tarjetas-dibujo. En las
tarjetas se escribirá el mismo nombre que en las tarjetas dibujo, de igual
tamaño, tipo de letra y color. Lo hacemos así porque con este material el niño deberá realizar
ejercicios de asociación.
Para trabajar con este material se
empieza enseñando al niño la primera tarjeta que se ha hecho con la foto y el
nombre. Se hacen comentarios sobre la foto y se invita al alumno en que se fije
bien y haga lo mismo. Tras una conversación, se atrae la atención del alumno
sobre la tarjeta-palabra que solo tiene el nombre escrito, y se establece un
diálogo similar.
Los diversos ejercicios que pueden
realizarse son:
-
Emparejamiento de las tarjetas-foto con las
tarjetas-palabra.
-
Asociación de las tarjetas-palabra con otras
tarjetas-palabra iguales.
-
Clasificación de todas las tarjetas que son
iguales.
-
Selección: se pide al alumno que seleccione la
tarjeta-palabra que se nombra.
-
Denominación: se pide al alumno que mire y diga
el nombre de la palabra que está escrita en cada una de las tarjetas que se le
muestra.
(Lista de actividades ordenadas en grado
creciente de dificultad.)
Libros personales:
Llamamos libros personales a los que
se confeccionan expresamente para cada alumno en función de las palabras que
lee, de lo que tiene que repasar o aprender, de loas temas q le interesan…etc.
El objetivo es mantener alta su motivación. Cambiando de material y, en este
caso, acostumbrando a pasar páginas y a
usar un material más parecido a los cuentos reales.
Los libros se confeccionarán con cartulinas
blancas o de color marfil, perforadas con dos agujeros en los que se meten unas
anillas que sujetan las hojas y que permiten pasarlas con facilidad. A modo
orientativo los libros deberán tener de 5 a 7 hojas y conviene también que vayan
acompañados de una portada vistosa.
Otros materiales:
-
Fichas-papel con frases
-
Abecedario personal
-
Fichas-papel para trabajo con lápiz
Los sobres sorpresa:
Son un enfoque diferente de
presentar la actividad que al presentarse de forma más lúdica, los niños acogen
con mayor entusiasmo. Consiste en varios sobres de colores diferentes. Dentro
de cada uno se incluye el material necesario para realizar una actividad,
adecuada a los objetivos que se están trabajando. Las palabras y las frases se
escriben sobre cartulinas de uno o varios colores diferentes, los dibujos de
objetos o las escenas también se presentan sobre otras cartulinas. Puede trabajarse
objetivos de cualquier nivel. Es conveniente disponer de 3 o 4 sobres sorpresa
que se ajusten a un mismo objetivo, para que sea el alumno el que elija el que
desea hacer. No se incluyen normas de realización y es el profesor el que las
da verbalmente una vez que el alumno ha sacado el material que contiene el
sobre.
En el exterior del sobre se escribe
con letras grandes un título que el alumno pueda leer.
Por
ejemplo: Con Laura tenemos un sobre
que lleva por título “Animales”. Este sobre contiene nombres de personas y de
animales; Laura, en la actividad, debe seleccionar entre todas, sólo las de
animales.
LECTURA ATENTA E
INTELIGENTE DE PALABRAS Y FRASES:
Para
mantener el objetivo de fomentar una lectura atenta e inteligente, debemos
preparar el material siempre de tal forma que al usarlo en las diferentes
sesiones se facilite al niño la reflexión. La búsqueda de soluciones, el
pensamiento lógico y la elaboración de respuestas adecuadas. Por ello conviene
preparar el material de papel y lápiz específicamente para dicho objetivo. (Ver ejemplo en
anexo)
LECTURA: SEGUDA ETAPA
Problemática de las sílabas:
El
camino para la generalización lectora, o sea la capacidad para leer cualquier
texto desconocido, pasa pero el aprendizaje y dominio de las sílabas. El
aprendizaje silábico es el medio, que permite descifrar las palabras nuevas.
Leer es fundamentalmente comprender lo leído, y no basta sólo con el
desciframiento, aunque este sea necesario.
En la lengua española las
combinaciones silábicas son sencillas y disfrutamos de un amplio vocabulario
formado por palabras de sílabas directas de dos letras cuya pronunciación permanece
inalterable, sea cual sea la posición que ocupen en la palabra. Apenas hay
excepciones de reglas fonéticas. Salvo poquísimas excepciones, las vocales se
pronuncian siempre igual, sea cual sea su posición en una palabra. Lo mismo
sucede con las consonantes. Las excepciones j y g, c y z, gu, gue, güi, así como la
parecida pronunciación de la b y la v, o de la i
y la y,
requieren unos ejercicios determinados.
Cuando los niños de habla española
comprenden que las palabras están formadas por sílabas que se corresponden a
los sonidos o golpes de voz que emitimos al leerlas, y aprenden a formar
palabras con sílabas directas, el resto del camino de la llamada lectura
mecánica es muy sencillo. Precisamente esa “facilidad” es lo que ha causado que
con frecuencia, se ha enseñado a leer de un modo incorrecto.
APRENDIZAJE DE SÍLABAS:
Es
muy importante hacer bien la enseñanza-aprendizaje de la sílaba ya que, como
hemos insistido repetidas veces, es preciso que durante todo el proceso lector
el alumno comprenda lo que lee, que lo haga con fluidez y soltura manteniendo
el gusto y la ilusión por la lectura.
Objetivos:
El objetivo general es que el alumno
lea con fluidez y soltura palabras formadas por cualquier sílaba, comprendiendo
inmediatamente su significado.
Material y modo de usarlo:
El objetivo de la utilización de este material es facilitar al niño un
reconocimiento casi automático de cada sílaba, semejante a lo conseguido en la etapa anterior. Igualmente
por medio de actividades y ejercicios de carácter lúdico y manipulativo, el
niño debe ir leyendo cerebralmente la sílaba con el objetivo de que, ante las
palabras, no tenga que detenerse en cada sílaba intentando recordar como hay
que nombrarla y dando lugar por tanto a una lectura silabeante, entrecortada.
Trabajaremos ejercicios de atención, asociación, reconocimiento, selección,
clasificación y denominación de sílabas. La composición de muchas palabras, con
sus sílabas, es una actividad que conviene practicar con frecuencia.
Aunque en el método de María
Victoria Troncoso el trabajo esta pensando para ser expresamente manipulativo
en niños de la edad de Laura, en su caso
introduciremos también ejercicios con
ayuda de la escritura de sílabas, para trabajar de forma más completa y amplia.
$ Lista de algunos
materiales que podemos utilizar
-
Tablillas-sílaba de madera o cartón
-
Cartulinas para formar palabras
-
Fichas para trabajo en papel
-
Lotos de sílabas.
LECTURA
ATENTA E INTELIGENTE:
También con las sílabas es
recomendable realizar lectura atenta e inteligente de palabras con todo tipo de
sílabas. Algunas de las palabras pudieron haber sido aprendidas por el alumno
en la fase uno de “reconocimiento de palabras” y otras podemos introducirlas
ahora por medio de la lectura de sílabas. Al prepararle ejercicios de lectura
atenta, la dificultad que se le propone es que reflexione y actúe de un modo inteligente.
Un ejemplo de lectura inteligente;
pueden realizarse ejercicios de asociación de palabras que se relacionen entre
sí por diferentes razones que el propio niño tiene que descubrir. Para darse cuenta de ello deberá leer antes
todas las palabras y entender la relación existente entre ellas.
LECTURA: TERCERA ETAPA
Durante esta tercera etapa que dura
mucho tiempo, deben facilitársele los recursos necesarios para que la lectura
sea un hábito que se mantenga en su vida de adulto. Esto sólo se conseguirá si
disfruta con lo que lee, si descubre que la lectura le proporciona ayudas muy
valiosas en su vida ordinaria, como pueden ser desde entender unas
instrucciones de cualquier tipo hasta comprender una crítica de cine ante de
ver una película o el comentario de un libro antes de comprarlo.
El objetivo general será por tanto,
que el alumno adquiera soltura, fluidez y afición suficientes para leer textos
largos, cuentos y otros libros.
Realmente debemos tener en cuenta
que estamos ante un objetivo muy ambicioso y que hoy en día la mayoría de
nuestros jóvenes no tiene hábito de lectura. Por ello la consecución y mantenimiento de estos objetivos puede
resultar difícil y costoso. Pero sin
duda alguna valdrá la pena lograrlo.
ESCRITURA
CONCEPTO Y PLANTEMAMIENTOS FUNDAMENTALES:
Escribir es representar palabras o
ideas con letras u otros signos gráficos trazados en papel o en otra
superficie. Es sencillamente, comunicar algo por escrito. Se trata de un
proceso que implica la motricidad, el lenguaje y la memoria. La coordinación
entre movimientos rotacionales en continuo desplazamiento, para realizar unos
trazos que puedan ser leídos e interpretados por otros es, probablemente, la
actividad de motricidad fina más compleja que podemos aprender. Se precisan
varios años de evolución para lograr soltura suficiente y un estilo personal.
Significante
y significado:
Para comprender las dificultes que
supone aprender a escribir, es preciso analizar sus dos componentes: el significante o la forma y el significado o mensaje que transmite.
Para el significante lo importante
es la forma de las letras y el movimiento para trazarlas. Es necesario tener la
capacidad y el control voluntario de la presión del instrumento y de la presión
que se hace con la punta sobre la superficie en la que se escribe. Es preciso
que haya coordinación entre la imagen visual de los símbolos y los movimientos
de la mano para reproducir dicha imagen. Ello supone la interiorización y
recuerdo de los símbolos gráficos, el aprendizaje y ejecución casi automática
de los mismos.
El significado hace referencia a ese
lenguaje interior que quiere manifestarse por escrito para que otro lo conozca.
Escribir en su pleno sentido es pensar y pasar a símbolos gráficos y legibles
mensajes que el receptor pueda decodificar y entender.
En
resumen, estos aspectos que hemos querido destacar sobre la escritura nos
han servido para hacer notar que es mucho mayor la complejidad que rige este
proceso, que el de la lectura.
METODO DE ESCRITURA
Muchos
autores recomiendan que ambos aprendizajes, escritura y lectura, se realicen al mismo tiempo. Con
este método se han obtenido resultados muy
positivos si trabajamos primero la lectura y posteriormente la
escritura.
El acercamiento a la escritura se
inicia de un modo opuesto al de la lectura. En la lectura se comienza con una
palabra, por lo tanto, con un grafismo complejo, cuyo significado se le dice a
l niño quien lo acepta y lo aprende enseguida. En la escritura se inicia con el
trabajo gráfico solo, aprendiendo y practicando los trazos más elementales y
simples, que no tienen ningún significando lingüístico.
Tras el aprendizaje en el trazado de
diversas líneas (Anexo.3.), el niño aprende el
trazado de aquellas letras que tienen menos dificultad para ser trazadas.
Después se inicia el trabajo de enlace de letras para las primeras sílabas. En
cuanto el niño es capaz empieza a escribir las primeras palabras. Y éste es el
momento en que comienza a unirse el significado y el significante. Empieza aquí
a comprender que puede comunicarse y transmitir mensajes por escrito.
Requisitos
iniciales
Existen
algunos requisitos iniciales que le niño deberá dominar antes de empezar a
trabajar la escritura; estos requisitos son:
a) Que el niño sea capaz de sujetar el
instrumento de escribir entre el pulgar y los otros dedos.
b) Que le niño sea capaz de realizar algunos
trazos o garabatos siguiendo con la mirada los movimientos de su mano
c) Que el niño haya comprendido que no debe
rebasar con sus trazos la superficie del papel. Comienza a inhibirse,
controlando sus movimientos y frenando.
Otras condiciones importantes a
tener en cuenta son:
$ Postura y
el mobiliario (adecuados al niño desde un punto de vista postural y motor)
$ Fisonomía
de la mano
$ Los
materiales (elegir el más adecuado para cada alumno.)
AYUDAS:
El profesor es la ayuda fundamental
que tiene el niño. Debe actuar como estimulador y facilitador del aprendizaje
de su alumno. Debemos ayudar moralmente
a nuestros alumnos pues la escritura es una tarea larga y ardua para ellos. No
olvidemos que el talante optimista y cordial del profesor le predispone a dar
gusto y a esforzarse.
Ayuda verbal y física:
El
profesor iniciará cada tarea con una explicación verbal, sencilla y entusiasta,
del trabajo a realizar. Hará una demostración del ejercicio propuesto para
facilitar la compresión del mismo por parte del alumno. Después, para que el
profesor se asegure de que el niño ha comprendido lo que tiene que hacer, le puede pedir por
ejemplo, que realice con su dedo el trazo que debe seguir posteriormente con el
lápiz; si el niño lo hace adecuadamente se le dará el material para que
comience el ejercicio. Es importante que en todo momento el profesor este
atento a la tarea del alumno y lo corrija tanto en la postura como en el trazo.
Probablemente las ayudas verbales
tengan que mantenerse durante mucho tiempo. A veces serán para que el niño
frene a tiempo:
-
“Cuidado,
cuidado… ¡para! … ¡ya!”
Otra
para marcarle el timo del movimiento:
-
“Deprisa,
deprisa”
Otras
para que cambie la dirección del trazo:
-
“Siiigue…
siiiigue”
Ayudas gráficas:
Estas ayudas pueden consistir en un
punto rojo que indique el inicio de un trazo, líneas discontinuas….
ESCRITURA: ETAPA DE
ATENCIÓN TEMPRANA Y PRIMERA ETAPA.
En la enseñanza sistemática de la
escritura propiamente dicha, distinguiremos tres etapas:
La primera etapa la consideraremos
previa a la escritura porque los objetivos van encaminados a lograr el dominio
de los trazos, sin hacer letras y a desarrollar el control motor. El niño
aprende y practica el trazado de líneas aunque le servirán después para hacer
las grafías.
La segunda etapa es la llamada de
iniciación al a escritura porque el alumno empieza a trabajar las letras y a enlazarlas formando sílabas y
palabras. También escribe sus primeras frases.
La tercera etapa es la denominada de
progreso en la escritura. En ella, sin descuidar la caligrafía, se atiende
fundamentalmente al significado, al contenido, a que se transmite y cómo se
hace desde el punto de vista de las normas de la lengua. Por tanto, la
ortografía, la gramática, la morfología y la sintaxis ocupan un lugar destacado
en la programación, en el desarrollo de las sesiones y en la realización de los
ejercicios.
PRIMERA ETAPA
El objetivo general es que el alumno
desarrolle las habilidades perceptivas y motrices para trazar todo tipo de
líneas necesarias para hacer más adelante las primeras letras y enlazarlas.
En esta etapa es muy importante
enseñar al niño desde el principio la direccionalidad correcta de cada trazo.
Se hace así para ayudarle a interiorizar los trazados y facilitarte el enlace
posterior de las letras, escribiendo hacia la derecha, como es el sistema de
nuestro lenguaje escrito. Con el aprendizaje de la dirección correcta se
economizan movimientos y esfuerzo., ganándose en claridad y legibilidad de la
letra.
En principio, las direcciones que
conviene respetar son de arriba abajo y de izquierda a derecha. Por ejemplo, el
trazado del círculo conviene hacerlo en
la dirección que después facilitará el trazo de la “a” y la “d”; por lo tanto
deberá realizarse en sentido opuesto a las agujas del reloj. Nada queda al
azar.
Trazos verticales:
Este
es el primer trazo que enseñamos ya que la posición de la mano durante la
ejecución permite ver el punto de partida, la trayectoria y el punto de
llegada. Este trazo supone solo un desplazamiento del brazo. Las hojas se preparan
teniendo en cuenta los objetivos perceptivos y el vocabulario de imágenes que
el niño conoce.
Ejemplificación de
actividades para conseguir estros trazos en el Anexo.3-A
Trazos horizontales:
Para los niños diestros
este ejercicio tiene la dificultad de que, con su mano derecha, van tapando la
trayectoria a seguir y el dibujo o punto de llegada. Necesitan por tanto más
control y coordinación visuomotara que para el trazado vertical.
Los alumnos zurdos pueden ver el
punto de llegada, pero es costos para ellos el deslizamiento hacia la derecha y
suelen adaptar posturas incorrectas. También es probable que quieran cambiar el
papel de posición. Conviene insistir con suavidad en la postura y en al
correcta posición del papel para que se acostumbren desde el principio a aquellos
hábitos que les facilitarán escribir después con soltura y con buena letra.
Trazado de la cruz:
Solo
se inicia este punto cuando se han conseguido los anteriores. Las ayudas que se preparan son
semejantes a las que el niño se ha acostumbrado al trazar la raya vertical o la
horizontal, trazando una línea que una los dos dibujos que son iguales
siguiendo la trayectoria marcada con puntitos o el camino señalado por
paralelas
Trazado de diagonales:
Se
preparan los ejercicios del mismo modo que los de las líneas verticales y
horizontales, con dibujos de tamaño grande.
(Anexo.4)
Trazado del círculo y de las
líneas curvas:
Los niños pequeños, en la etapa del garabateo,
suelen realizar trazados circulares continuados, sin intención aún de hacer un
círculo o un apelota. Con secuencia estos movimientos circules se ejecutan de derecha a izquierda, empezando por abajo y
terminando arriba a la izquierda. Sin embargo, conviene enseñar a los niños que
hagan esos movimientos en la dirección que interesa para el trazado y enlace de
las letras como hemos dicho empezando por arriba a la derecha y girando en el
sentido opuesto a las agujas del reloj, para terminar en el lado derecho.
Cuando haya adquirido soltura en estos trazos, puede empezar a trazarse el
círculo.
Al principio se elige el tamaño del
círculo que coincide más o menos con el que le sale al niño de modo espontáneo.
El trazado de semicírculos, en sus
diferentes posiciones, se inicia cuando el niño ha adquirido cierta soltura
haciendo los círculos. Conviene que se ejercite en semicírculos individuales
antes de realizar ondas continuadas, porque es más difícil. (Anexos 3-B)
Trazado de números:
Es
un buen momento para que el niño practique el trazado de números. Conviene preparar
láminas en las que haya un número de dibujos que correspondan a la cifra que se
traza. Aunque es un trabajo de escritura y no de cálculo, conviene que el niño
mantenga el concepto de cantidad
atribuida a ese dígito. (Anexo.5.)
SEGUNDA ETAPA
Los niños que han seguido este
método de lecto-escritura, han practicado la composición de frases con las
palabras escritas previamente en cartulinas. También han realizado un gran
número de ejercicios de formación de palabras con las sílabas que estaban escritas
en cartulinas. Con esos ejercicios, el niño ha comprendido que es componer un
texto escrito, una frase, a partir de elementos más simples como palabras o
sílabas. Ha memorizado muchas sílabas de uso frecuente…
El objetivo de esta segunda etapa,
es que el niño aprenda el trazado de cada una de las letras del alfabeto, el
enlace o unión de letras en sílabas y la formación de palabras y primeras
frases.
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MODO DE TRABAJAR:
El
trabajo con las letras, sílabas y palabras se hace de un modo parecido en los
tres casos.
Se prepara una hoja de papel en cuya
parte superior está escrito el nombre del niño (la letra, sílaba o palabra en
su caso), en tamaño grande con rotulador rojo de punta gruesa. Debajo se
escribe de nuevo el nombre (la letra, sílaba o palabra en su caso), con línea
de puntos. El objetivo es que el niño repase por encima. El profesor llevará la
mano del niño para dirigirle en los giros y movimientos de desplazamiento y
para evitar que levante la mano. Poco apoco el niño se da cuenta de que no se
trata de dibujar, sino que es necesario trazar de un modo determinado.
A continuación se empezará la
enseñanza del trazo de vocales que tiene el nombre del niño. Se elige la mas
sencillo más significativa. En la parte superior de una hoja se escribe cuatro
o cinco veces la vocal elegida. Debajo de cada
letra se escribe otra del mismo tamaño con trazado discontinuo. Y se señala con un
punto grueso, el sitio exacto en el que hay que apoyar la punta del lápiz para
iniciar el trazo.
Después de varias láminas el niño
será capaz de trazar esa letra con seguridad y rapidez siguiendo la dirección
correcta. En ese momento puede dejarse en blanco una de las líneas, de modo que
el niño se encuentre solo frente al punto de referencia que marque el inicio
del trazo. Si el niño se pierde y vemos que no es capaz, volveremos al paso
anterior con la ayuda gráfica de las líneas discontinuas.
Durante bastante tiempo es necesario
que el alumno se ejercite en el trazado de cada letra en hojas de trabajo que
tengan cuatro filas de paralelas. La primera fila es para el modelo que pone el
profesor, la segunda es para las letras hechas con puntos y la tercera se deja
sin ayudas gráficas para que el niño muestre cómo va aprendiendo a hacerlo solo
y la última fila se prepara con letras hechas con líneas discontinuas para que
el niño las repase, terminando así la tarea con un resultado siempre aceptable.
(Anexo. 6.)
El trabajo de aprendizaje
de las consonantes se hace de un modo semejante. Se empieza con las consonantes
que tiene el nombre del alumno. Después se eligen aquellas que se trazan con facilidad y que, además, se
encuentran con mayor frecuencia en las palabras que el niño lee con soltura.
Esto permite realizar alguna tarea en la que la lectura y la escritura se
refuercen mutuamente.
Enlace de las letras, “Las
sílabas”:
No
necesitamos esperar a que el niño haya aprendido a trazar todas las letras del
alfabeto para enseñare cómo se hacen los enlaces y cómo se forman las primeras
sílabas. De hecho, en cuanto aprenda a trazar la “m”, que es una de las
primeras consonantes que aprenden a escribir, se le puede enseñar a unirla con
las 5 vocales.
Ante la dificultad de esta tarea,
las mejores estratégicas que facilitan el trabajo del alumno son la preparación
de las sílabas grandes para repasar y el llevarle de la mano en los primeros
ejercicios. De este modo siente los movimientos semirrotatorios que tiene que
hacer sin levantar el lápiz. Mas tarde el niño ya hará las grafías solo con
ayudas verbales.
Es fundamental que el niño
interiorice y trace las sílabas porque es lo que más le va ayudar para escribir después con
facilidad. Cuando oye una palabra, percibe los sonidos de las sílabas y no los
de las letras aisladas. Al mismo tiempo que oye, asocia esa palabra con la
imagen visual de la misma que ha aprendido a reconocer con el método de
lectura. Con suficiente práctica el niño evocara con rapidez las formas
gráficas que corresponden a los sonidos y adquirirá la habilidad manual
suficiente para trazarlas con soltura.
Primeras palabras:
Las primeras palabras que el niño puede repasar y copiar son aquellas
cuya sílaba se repite, como sucede con papá y mamá. También puede hacerlo con
palabras fáciles, de tres letras, como pie y pan. Estas palabras serán las que
comience a escribir al dictado y de un modo espontáneo, sin modelo, porque
puede aprenderlas con rapidez.
Durante el proceso del aprendizaje lector, el niño ha trabajado mucho con
las sílabas, completando y formando palabras. Se ha acostumbrado a nombra las
sílabas, a veces jugando a lotos y a
otras veces a memorys.
La interiorización silábica debe practicarla cuando escribe uniendo las
letras, porque le sirve de gran ayuda
para saber como tiene que formar las palabras escritas.
Es muy útil que realice ejercicios completando palabras con sílabas que
faltan. Se prepara una lámina con varios dibujos, cuyos nombres contentan una
sílaba igual. Los primeros ejercicios tendrán esa sílaba en la posición final
de cada palabra. Se trata de facilitar al niño la evocación de la sílaba a
escribir porque al mirar el dibujo y decir la palabra corresponde, el último
sonido es de la sílaba que tiene que poner. El niño así, puede recordarla con
más facilidad. Más adelante no importará el lugar que ocupe la sílaba a escribir.
Paulatinamente se trabajará con otras sílabas de uso frecuente por el alumno…
Caligrafía:
Conforme el niño tiene más soltura y habilidad manual, es preciso que se
le recuerde y ayude a trazar bien las letras. Por ello, además de los
ejercicios que le hacen pensar, tiene
que realizar practicas con el objetivo claro de lograr una buena letra.
En nuestro caso utilizaremos papel pautado y un lápiz que ayude a Laura a
controlar mejor su trazado y a comprobar con facilidad la perfección de sus
grafías.
Las laminas de caligrafía se preparan de una en una, adaptándose a las
necesidad que en se momento tenga el alumno. Conviene poner modelo con sílabas
solas y con palabras de dos sílabas directas. Debajo de cada modelo el alumno
hará una fila, copiándolo. Hay que tener en cuenta que no debemos dejar que el
niño haga varias filas si no tiene justo en la inmediata de arriba un modelo
hecho por el profesor. Los niños tienden a mirar la fila anterior. Si esta la
han hecho ellos y, por tanto, no esta muy bien, copian algo defectuoso y aún
les sale peor.
Dictado; la escritura atenta e
inteligente de palabras
El objetivo de los dictaos que se hacen en la etapa inicial es ayudar al
niño a transformar el código fonético en código gráfico. Es preciso evocar y
transformar los fonemas en grafemas y realizar la compleja acción motora para
trazarlos.
El trabajo realizado con las sílabas
escritas en cartulinas le sirve como recuerdo fonético y visual. Se le
dictarán las palabras que lee y conoce muy bien para facilitar su escritura
correcta.
Puede ocurrir, cuando se le dictan
las primeras palabras, que escriba solo algunas letras, por ejemplo papá queda
reducido a oá, paá, apá. Poco a poco va dándose cuenta y
hace una escritura más correcta y completa.
Para facilitarle la tarea, pueden
escribirse en la hoja de trabajo todas las sílabas que va a necesitar. Conviene
que estén colocadas en diferente orden al que necesita para usarlas. Cuando el
niño sepa qué sílaba necesita e incluso la nombra, puede buscarla y limitarse a
copiarla. Poco a poco deja de poner las sílabas que sabe trazar de memoria y se
escriben sólo aquellas que no recuerda bien como son y cómo se trazan.
Otra de las actividades propias de
esta etapa es la de escribir el nombre de los dibujos que se le prestan en una
hoja de papel (Anexo.7.)
Escritura
de frases:
A
veces les resulta difícil inventarse o crear frases; por ello, en las fases
iniciales se les puede preguntar sobre las experiencias vividas recientemente
para ayudarles en la creación. Por ejemplo el alumno puede contar qué ha hecho
ese día o qué ha comido.
Otro modo de ayudarle es el de poner
dibujos en la hoja de papel; de esta forma, el niño piensa una frase que tenga
relación con lo que ve. Es posible que la estructura gramatical no sea correcta
y que el alumno nos presentes ideas desordenadas. En estos casos el profesor
intervendrá para ayudarle a mejorarla, pero siempre respetando la idea y
contenido de lo que el alumno ha pensado. A continuación el alumno la
escribirá.
Con suficiente práctica y poco a
poco, el alumno será capaz de escribir frases relacionadas temporalmente por el
orden de sucesión de los hechos. Se preparan láminas que presenten acciones
para que el alumno explique qué sucede. Después escribirá tres frases cortas.
Desde el principio, al igual que se
hacía en el aprendizaje de la lectura con la composición de frases, se enseña
al alumno a construir frases de 2 o 3 palabras con una estructura correcta, por
ejemplo “bebo agua”, “veo la tele”…paulatinamente se
escribirán frases más largas y mas creativas.
Siempre intentaremos que el alumno
piense y elabore lo que va a escribir, por lo tanto, la actitud del profesor
ante el resultado caligráfico será tolerante. No debemos agobiar al alumno con
correcciones en varios frentes a la vez (caligrafía,
gramática…), ya que esto puede agobiarle e incluso podemos encontrarnos con
situaciones en las que nuestros alumnos no quieran seguir con la práctica. Es
preferible trabajar un solo objetivo, y valorar así un progreso específico.
Copias:
Quiero remarcar aquí que no es
aconsejable el uso desmedido de las copias. Este tipo de actividades no
precisan de ningún tipo de razonamiento, ni se ejercita a través de ellas la
memoria. Muchos niños copian letra a letra como si fuese un dibujo y ni tan
siquiera retienen la palabra completa.
La única copia que realmente tiene
cabida es la de los modelos preparados expresamente para mejorar la letra.
Uso
funcional de la escritura:
Cuando trabajamos con un alumno, y
más si esta en la franja de edad de Laura, es necesario hacer que el niño se
sienta valorado y estimado, que los demás cuenten con él, que compruebe el
mismo su progreso, que cuanto aprende y hace le produzca bienestar,
independencia y autonomía. Ese valerse por sí mismo. Todo esto es
aplicable a todas las áreas formativas, incluyendo, por supuesto, la de la
escritura.
En cuanto el niño haya alcanzado los
objetivos de esta segunda etapa, se contará con él y sus habilidades para
escribir ene el hogar y en la escuela.
Por ejemplo; puede ser el encargo de hacer
la lista de la compra.
Este
ejercicio práctico y funcional es de auténtica normalización e integración
social.
ESCRITURA: TERCERA ETAPA
El objetivo de esta etapa de
progreso en la escritura es de carácter lingüístico, aunque no de be dejarse de
lado el trabajo caligráfico.
Para la elaboración de un buen
programa de progreso en la escritura, es preciso tener en cuenta todos los
aspectos que intervienen en la calidad del lenguaje escrito. De este modo, las
estrategias de intervención y de mejora se diseñaran de un modo específico para
cada una de esas facetas. Se sabrá en cada momento qué se pretende conseguir.
Así, tendremos en cuenta la caligrafía, la ortografía, el vocabulario
y la morfosintaxis,
el contenido
del mensaje a transmitir y la creatividad.
Algunos
“pinceladas” al respecto a mi trabajo con Laura:
Antes de comenzar a comentar como he
llevado a cabo mi trabajo con esta alumna, me gustaría concretar el sentido explícito
que le pretendo dar a este apartado en el documento.
Primeramente quiero aclarar que no
tengo la pretensión de explicar aquí todo el proceso que he seguido con Laura,
pues cada paso, ya esta explicado a lo largo de estas 35 páginas, dónde se han
resumido y resaltado los puntos más importantes y característicos, del método
de lecto-escritura de María Victoria Troncoso.
Sencillamente, me limitaré a dar algunas “pinceladas” sobre la adaptación
del método que yo he llevado a la práctica, explicando dónde he encontrado
mayores dificultades, y dónde mayores facilidades en mi trabajo con la niña.
Quiero dejar clara constancia de que éste, es un caso particular, y por
lo tanto los resultados conseguidos no se pueden generalizar ni extrapolar a
otros alumnos u otros casos.
Teniendo esto presente en cada momento
a lo largo de mi explicación comenzaré el desarrollo de este último punto.
Cómo
hemos explicado al inicio del trabajo, me he decantado a trabajar con este
método porque se centra más en lo visual que en lo auditivo.
Al comienzo del programa realizamos
una serie de actividades con dinámicas de juego con el fín de valorar las capacidades de la niña, su
actitud, y sus posibles limitaciones o dificultades. Desde un principio, Laura
puso de manifiesto las pocas ganas que “aparentemente” tenía de trabajar y su
“imposibilidad aprendida” ante las tareas. El “No puedo”, “No sé”, “Mi profe
dice que esto yo no se hacerlo”, predominaron en la conversación
durante prácticamente las 4 primeras sesiones de trabajo.
En un segundo momento, notamos que
tenía ciertas dificultades con su motricidad fina; a la hora de colorear, de
escribir su nombre o de dibujar en un papel cogía con problemas las
herramientas de trabajo. Pero poco tiempo más tarde vimos que ésta situación
también era debida a su falta de trabajo constante, y hoy en día, con
paciencia, hemos hecho muchos progresos en este aspecto.
Cuando empezamos a trabajar la
lectura y Laura sintió por primera vez que su esfuerzo era valorado, escuchando
las primeras palabras de ánimo, un primer “¡Muy bien!”, “¿Ves como sabes?”, la
sonrisa de la niña paso a ser la protagonista de las sesiones y paulatinamente
fue dejando de lado aquellas expresiones de imposibilidad ante las tareas que
tenía tan arraigadas.
La primera etapa de la lectura y el
reconocimiento visual de algunas palabras fue relativamente fácil para ella. Teniendo
en cuenta sus intereses las primeras palabras que usamos fueron; Nieves, mamá, papá, Rodrigo, abuelo, cole,
bebe, gato, zumo, cama, mesa, nube, baño, silla y sol. Fuimos añadiendo dos
palabras más cada día.
En este punto empezamos a introducir
las fichas-papel para trabajo con lápiz, y comenzamos de así a trabajar su
motricidad fina encaminándola al proceso de la escritura.
El trabajo con Laura no esta
concluido, y actualmente estamos trabajando las sílabas (con tablillas de cartón) de las palabras que más dominadas tenía
en la primera fase. Sólo disponemos de una sesión semanal, y creo que es
preferible ir lento pero seguro, a intentar correr y que la niña vuelva a
colmarse de errores y sentirse desvalorizada.
Laura tiene algunos vicios a la hora
de silabear, me sorprendió la primera vez que la escuche diciendo “La
pe con la a, pá.” Puesto que me
consta que en los colegios desde hace años
no se trabaja la lectura de este modo. Decidí entonces preguntarle a su
madre, pensando que quizás ella, debido al empeño que tiene en que su hija
aprenda a leer la hubiese podido guiar con un aprendizaje como el que ella tuvo
de niña. La respuesta fue negativa. El caso es que a Laura, le resulta
complicado y lioso deshacerse de esa costumbre que ya tiene como vicio. Pero no
dudo de que día tras día, con grandes dosis de paciencia, no solo por mi parte,
sino también por la de sus familiares; el milagro del que hablaba su maestra,
sin duda alguna, va a tener lugar.
Anexo.1.
Anexo.2.
Anexo.3.
-A-
-B-
Anexo.4.
Anexo.5.
Anexo.6.
Anexo.7.
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