sábado, 12 de enero de 2019

La igualdad de género en las aulas

rabajar la igualdad de género desde la escuela, especialmente con los niños y niñas de Educación Infantil y Primaria, puede ayudar a eliminar los estereotipos relacionados con el género y, por consiguiente, a prevenir situaciones de discriminación sexista en el futuro. Esta es la premisa que los participantes en este monográfico comparten. La mayoría reconoce que en los centros se están haciendo esfuerzos por llevar a cabo estrategias y metodologías educativas que contribuyan a romper con los estereotipos sexistas establecidos, pero que aún queda camino por recorrer.
 
Modificar los contenidos sexistas en los materiales educativosformar al profesorado en propuestas pedagógicas como la coeducación, así como realizar cambios físicos en los propios espacios de las escuelas que favorezcan la igualdad de género son algunas de las ideas que los entrevistados y articulistas de esta publicación sugieren para poder cambiar los estereotipos sexistas desde la primera infancia. También coinciden en que tanto los docentes como las familias deberían trabajar juntos para romper estereotipos y favorecer la igualdad de género tanto en la escuela como en la sociedad en general.
 

Cambiar estereotipos de género desde la primera infancia

Existen diversos estudios que intentan explicar cómo se adquieren los estereotipos de género durante la infancia y cómo se pueden evitar. Los teóricos del aprendizaje social consideran que estos son pautas de conducta aprendidas mediante la experiencia directa e indirecta, y la observación.
 
El respeto al otro y la no violencia se aprenden sobre todo con la práctica de las relaciones que niños y niñas establecen en la familia y en la escuela, y es difícil que dichos valores se puedan enseñar si las personas que lo hacen no se comportan de acuerdo con esos valores. Así lo asegura la investigación "Convivencia escolar y prevención de la violencia de género desde una perspectiva integral", de María José Díaz-Aguado Jalón, Catedrática de Psicología de la Educación en la Universidad Complutense de Madrid, publicada en la revista Participación Educativa: La educación, factor de igualdad, del Consejo Escolar del Estado (2009).
 
Pero ¿cuándo empiezan los menores a adquirir estos estereotipos de género? Las niñas comienzan a sentirse menos inteligentes que los niños a partir de los 6 años, lo cual influye en las aspiraciones profesionales de las mujeres, según la investigación "Gender stereotypes about intellectual ability emerge early and influence children's interests" (2017), realizada por investigadores estadounidenses y cuyos resultados han sido publicados en la revista Science. El estudio revela también que las niñas de 6 años son menos propensas que los niños a creer que los miembros de su género son "realmente inteligentes" y comienzan a evitar actividades que consideran relativas a los niños "brillantes". La investigación concluye que las ideas culturales sobre el género se adquieren desde edades tempranas y estas nociones estereotipadas afectan los intereses de los más pequeños.
 
El estudio  Actitud en niños y adultos sobre los estereotipos de género en juguetes infantiles (2008) desvela también que tanto las niñas como los niños de entre 3 y 7 años ya relacionan los juguetes con su género influenciados por factores tradicionales y de género que adquieren en el seno familiar, escolar y a través de los medios de comunicación. Las conclusiones de esta investigación, realizada por académicos de la Universidad de Granada, indican que es necesario promover la formación de los educadores hacia la igualdad de género, ya que su aportación en las aulas es la mejor manera de empezar a eliminar los contenidos sexistas en nuestra cultura.
 
Por tanto, los especialistas en el tema consideran que el papel del sistema educativo y los docentes, así como de la familia, es fundamental para la transmisión de valores de respeto, tolerancia e igualdad entre mujeres y hombres. La mayoría coinciden en que es necesario ayudar a los escolares a reflexionar y a ofrecerles estrategias que les permitan prevenir o erradicar de su entorno íntimo, personal y social la desigualdad y, por ende, la violencia de género.
 
De hecho, en la última modificación de la LOMCE del 23 de marzo 2018 hace referencia a que es necesario "el desarrollo, en la escuela, de los valores que fomenten la igualdad efectiva entre hombres y mujeres, así como la prevención de la violencia de género". También destaca que los consejos escolares deben "proponer medidas e iniciativas que favorezcan la convivencia en el centro, la igualdad entre hombres y mujeres, la igualdad de trato y la no discriminación".
 
En Primaria y sobre todo en Educación Infantil el alumnado tiene una gran receptividad a la hora de aprender, por lo que constituyen las etapas idóneas para que los niños y niñas asimilen de pautas de conducta igualitarias, explica María Amparo Rosa Torres, docente de la Escuela Infantil "El Molí" de Paterna, de Valencia, en su artículo "Estrategias educativas para evitar la discriminación de género", (2009), publicada en la revista Compartim, del Servici de Formació del Professorat de la Generalitat Valenciana.
 

Políticas de centro basadas en la coeducación y los planes de igualdad

 
Establecer la coeducación como propuesta pedagógica del centro constituye la política educativa más idónea para educar en equidad de género desde la escuela, de acuerdo con los participantes en este monográfico. En la coeducación, la formación y la educación se imparten en condiciones de igualdad para ambos sexos y no se pone límites a los aprendizajes de cada uno de ellos. "La escuela coeducativa tiene como objetivo la eliminación de estereotipos entre sexos  superando las desigualdades  sociales  y las jerarquías culturales entre niñas y niños", según la Guía de Coeducación: Síntesis sobre la Educación para la Igualdad de Oportunidades entre Mujeres y Hombres (2008), del Instituto de la Mujer.
 
Resulta entonces necesario que en el entorno educativo se trabaje en la coeducación y la corresponsabilidad desde edades tempranas y en todos los niveles educativos, según los especialistas. Para ello es necesaria la implicación de toda la comunidad educativa del centro e implementar entre todos sus miembros un proyecto coeducativo de toda la escuela.
 
"Son muchas, casi infinitas, las estrategias, planes y acciones que se pueden llevar a cabo en los centros escolares. Todas estas pasan por ser efectivas cuanto más pronto comiencen a implementarse entre los alumnos de Educación Infantil y Primaria. Pero no debe ser exclusiva de estas etapas, ya que esta se puede y debe seguir tratando y actualizando a lo largo de todo el sistema educativo incluyendo, por qué no, el ámbito universitario", consideran en su artículo para este monográfico los profesores e investigadores del grupo de investigación AREA (HUM-672), del Departamento de Didáctica y Organización Escolar, de la Universidad de Granada.
 
Investigaciones como el estudio Diferencias de género en los resultados educativos: medidas adoptadas y situación actual en Europa (2010), de la Agencia Ejecutiva en el Ámbito Educativo y Cultural (ACEA Eurydice), revelan que el sistema escolar continúa reproduciendo los estereotipos de género y el sexismo a través de aspectos como: la propia organización del centro, las actitudes y expectativas del profesorado, el currículo académico, los materiales didácticos, el espacio, las metodologías de enseñanza, etc.
 
Los expertos en educación afirman que para trabajar la igualdad de género desde la escuela es necesario llevar a cabo políticas de centro encaminadas a la coeducación, y también planes de igualdad. En diversos centros educativos ya se llevan a cabo, pero su implementación tendría que generalizarse.
 
El proceso para llevar a cabo un plan de igualdad consta de tres fases principales que se pueden poner en marcha de forma consecutiva: el diagnóstico de igualdad de género en el centro educativo, el diseño e implementación del plan de igualdad y el seguimiento y evaluación del mismo, indica el Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades en su publicación Educación en Igualdad. Propuesta metodológica sobre coeducación (2015), donde también se recogen recursos para trabajar en el aula la igualdad de género, así como cursos y blogs de coeducación para docentes.
 
Las fuentes investigadas para este reportaje y los participantes en este monográfico coinciden en llevar a cabo políticas de centro como las siguientes:
 
  • Incluir la igualdad de mujeres y hombres en el proyecto educativo del centro, en las programaciones curriculares y en la asignación de responsabilidades y espacios.

  • Realizar periódicamente formación para los docentes en coeducación y estrategias para favorecer la educación en igualdad de género.

  • Seleccionar materiales escolares, libros de texto, recursos pedagógicos y proyectos educativos no sexistas, así como trabajar contenidos que fomenten los valores de igualdad, como, por ejemplo, canciones, libros, referencias y modelos que contribuyan a ofrecer una visión nueva y más acorde con la igualdad entre los sexos.

  • Estipular que el profesorado evite tratar de forma diferente a los niños y a las niñas en clase según su género y los/las motiven a participar por igual en las tareas del aula y a compartir por responsabilidades de la misma forma.

  • Fomentar en clase y fuera de ella juegos y juguetes neutros, cooperativos y compartidos. Sería necesario establecer, como política de centro, que los patios sean coeducativos, es decir, que cuenten con tres espacios bien diferenciados: un área de juego tranquilo, otra de movimiento y psicomotricidad, y otra de experimentación con la naturaleza.

  • Colaborar con las familias y formarlas para proporcionarles pautas y criterios a practicar en casa para evitar los estereotipos sexistas.
 
"Todo ello debe conllevar un plan integral en cada centro en el que también se haga partícipes a las familias, así como a los distintos agentes que intervienen en la educación, al profesorado y a los equipos directivos. Además, todo debe basarse en un sistema evaluable con el tiempo y la implantación de los distintos planes", añaden en su artículo para este monográfico los profesores e investigadores del grupo de investigación AREA (HUM-672), del Departamento de Didáctica y Organización Escolar, de la Universidad de Granada.
 
Por su parte, Ainara Madariaga, Responsable de Igualdad del Colegio Berrio-Otxoa Ikastetxea, de Bilbao, y entrevistada en este monográfico, considera necesario que como política de centro se cuente con un equipo de trabajo dedicado a la coeducación, que tenga una relación estrecha con el equipo directivo y con el claustro de profesores para ir trabajando en conjunto.
 

Recursos y buenas prácticas para educar en la igualdad

 
En un estudio reciente del European Institute of Gender Equality (EIGE) (2017) se alienta a los responsables políticos y directivos de centros educativos a abordar los estereotipos de género desde edades tempranas a través de materiales de enseñanza sensibles al género y la capacitación del profesorado.
 
Cada vez hay más recursos y ejemplos de buenas prácticas que pueden ayudar a docentes y familias a trabajar la igualdad de género a edades tempranas, según los participantes en este monográfico. Entre estas herramientas destacan:
 

1. Literatura infantil y vídeos

 
"Existe mucha literatura infantil donde sus protagonistas rompen con roles y estereotipos de género, donde encontramos a princesas que luchan y se defienden, a chicos que lloran y muestran libremente sus sentimientos", explica en su entrevista para este monográfico, Eva Morales, educadora y miembro del colectivo Pedagogías Invisibles, que desarrolla talleres para docentes sobre cómo educar en igualdad de género.
 
En internet se presentan diversos recursos que recomiendan libros no sexistas para trabajar en clase. Por ejemplo, se puede consultar una recopilación realizada por expertos en literatura infantil de la Biblioteca de l'Associació de Mestres Rosa Sensattitulada Noies i Nois: Tants a tants. Selecció de llibres per impulsar la lectura, la coeducació i el debat a Parvulari i a Primària (2011), en el que se recomiendan libros de ficción cuyos contenidos potencian la igualdad de oportunidades, la superación de clichés de género, etc. Este trabajo recibió un premio por parte del Ajuntament de Barcelona y ofrece recursos a los maestros, profesorado y mediadores sobre obras de ficción que permiten una mirada y una reflexión coeducativas entre el alumnado.
 
También existen diferentes recursos audiovisuales para trabajar la equidad de género entre los más pequeños de la escuela. Por ejemplo, en el blog del Profe Juan, el profesor del CEIP García del Olmo de Málaga detalla algunos cortos interesantes para trabajar el tema entre los niños y niñas de Infantil y Primaria, como El Príncipe Ceniciento o Una Blanca Nieves diferente.
 
Otro ejemplo es Superlola, un cuento coeducativo y un vídeo basado en el mismo. Ambos han sido lanzados por el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) en 2015. La historia trata sobre  Lola, es una niña de cuatro años que sueña con ser una superheroína para cambiar el mundo y hacerlo más justo. A partir del cuento y el vídeo, el Instituto ha elaborado una guía didáctica para el profesorado, que ha sido distribuida en las redes sociales y en el portal de la Consejería de Educación, además de la web del IAM.
 

2. Recursos educativos y cursos para el profesorado

 
Fundaciones relacionadas con la educación, las administraciones públicas, editoriales e incluso el propio profesorado comparten en internet diversos proyectos educativos,  recursos didácticos y cursos dirigidos a docentes para poder trabajar en Educación Infantil y Primaria el tema de la igualdad de género.
 
En la web Educar en igualdad se han recopilado una gran cantidad de recursos existentes para trabajar el tema en el aula. En el portal se pueden encontrar guías didácticas para el profesorado, creadas por las diferentes consejerías de educación de las comunidades autónomas, hasta materiales docentes publicados por organismos internacionales.
 
Otro recurso interesante, enfocado a Educación Infantil, es el Programa de Coeducación para Educación Infantil de la Consejería de Educación de Murcia, en el que se explican diferentes actividades que se pueden aplicar en el aula como, por ejemplo, juegos de rol en los que se plantea al grupo una situación imaginaria: padre, madre, hijos e hijas que representan una familia que ha de ponerse de acuerdo para repartirse las tareas de la casa.
 
Otro ejemplo es la guía Educación en la Igualdad: Cien propuestas de acción (2008), de la Fundación de la Toleranciacero, de la Comunidad Valenciana, donde además de dar sugerencias dirigidas al profesorado, como conferencias y tipos de cursos, se ofrecen ideas de actividades para trabajar con los alumnos, como talleres, concursos de pintura o escritura sobre el tema, entre otros.
 
Las editoriales también se han apuntado a crear proyectos educativos que promueven la igualdad de género. Uno de ellos es  La Peluca de Luca, un proyecto coeducativo dirigido a Infantil y primer ciclo de Primaria (3 a 8 años), cuyo principal objetivo es romper y eliminar los estereotipos y prejuicios adscritos al sexo, con la intención de favorecer la posibilidad de que cada niño y cada niña se desarrolle libremente. Cuenta con un pack de guías didácticas para profesores y material escolar para el alumnado, que incluye un cuento de este personaje para cada niño o niña. El proyecto también una aplicación y diversos materiales que también pueden aplicarse desde las familias.
 
Dado que la formación de profesores en temas de coeducación es importante para poder educar en igualdad en las aulas, existen cursos especiales y formaciones específicasEva Morales, del colectivo Pedagogías Invisibles, explica en su entrevista que desde esta iniciativa se realiza el curso online Yo, Tú, Él, Ella… Conciencia de género en el espacio educativo con el objetivo de mostrar al profesorado cómo trabajar las pedagogías en cuestión de género en el aula. También hay otras opciones a considerar, como las ofrecidas por las consejerías de educación de las comunidades autónomas o bien en algunas universidades.
 

3. Buenas prácticas

 
Ejemplos sobre cómo educar en igualdad de género desde la infancia en las escuelas pueden encontrarse en diversas partes tanto de Europa como de España, de acuerdo con la Guía de buenas prácticas en coeducación en Europa. Entre ellas destacan las realizadas por escuelas que han llevado a cabo planes de igualdad que incluyen actividades frecuentes para reforzar la coeducación, como revisar y corregir los materiales curriculares y documentos del centro que expresen discriminación por razón de sexo, formar a los profesores en el ámbito y realizar actividades lúdicas y educativas dentro del aula que refuercen la igualdad de género.
 
Otra buena práctica es la mencionada por Eva Morales en su entrevista: en Suecia educan desde parvulario a los niños en una forma neutra, ya que los juguetes, los materiales escolares, los contenidos educativos evitan reflejar los estereotipos sexistas, y se trabaja mano a mano con las familias para que en casa suceda lo mismo.
 
Desde las administraciones también se han incluido planes de igualdad de género que incitan a las escuelas a implementar estrategias relacionadas. Por ejemplo, en el Pla per a la igualtat de gènere en el sistema educatiu, de la Generalitat de Catalunya, aprobado en 2015, se promueven medidas específicas para la igualdad de género en los diversos ámbitos educativos, como cambios en contenidos y métodos de enseñanza, así como actividades escolares sobre la temática. De hecho, la Generalitat tiene en su web un apartado especial sobre coeducación e Igualdad de Género con recursos, bibliografía, buenas prácticas y protocolos relacionados. El Gobierno vasco también ha implementado un Plan director para la coeducación y la prevención de la violencia de género en el sistema educativo (2013), y en Andalucía, también se ha renovado su II Plan Estratégico de igualdad de Género en Educación 2016-2021.
 
Entre las buenas prácticas también destaca el proyecto de Col·lectiu Punt Sis, que ha desarrollado una iniciativa para la creación de una Red de patios inclusivos y sostenibles. El proyecto se ha realizado en dos colegios públicos: el CEIP Nuestra Señora de la Paloma y el CEIP Santa María, de Madrid, mejorando los patios escolares y su accesibilidad, poniendo el acento en cuatro claves: participación, inclusión social, igualdad de género, y sostenibilidad ambiental.
 
Así pues, educar en igualdad desde la primera infancia en las escuelas es una tarea que compete tanto al equipo directivo de los centros educativos, al profesorado, las administraciones y las familias. Aunque se han realizado esfuerzos para lograrlo, la implicación de todos y toda

No hay comentarios:

Publicar un comentario